Enfermedades 1-3

1.DESGARRO: es la lesión del tejido muscular acompañada por la rotura de vasos sanguíneos. Sientes un dolor agudo lo cual impide la contracción del músculo. Si el desgarro es de un músculo entero, aparecerá un hematoma debido a una hemorragia interna.

Es causada por un estiramiento más allá de su capacidad sin haber calentado previamente.

¿QUÉ HACER? Repose y póngase hielo en la zona del desgarro durante unos 30 minutos. Después véndeselo para frenar la hemorragia y mejorar la rehabilitación que, posteriormente, deberá realizar.


2.CALAMBRE: es una contracción de uno o varios músculos involuntaria y dolorosa. Puede ser debida a la pérdida de líquidos y sales minerales tras un gran esfuerzo o a causa del frío. También pueden ser consecuencia de una alteración de la irrigación sanguínea a los músculos

¿QUÉ HACER? Lo primero que se debe hacer es llevar a la persona a un lugar más fresco, ponerle paños fríos en todo el cuerpo, que descanse en una posición cómoda e hidratarlo idealmente con soluciones que tengan sodio. También hay que masajear el músculo con una fuerza contraria a la dirección de la contractura. Dependiendo de la intensidad y del área afectada, habitualmente es necesaria la intervención de otra persona.


3.ESGUINCE: es una lesión en alguna de las fibras de un ligamento sin llegar a su rotura. Se producen por un apoyo inadecuado de la articulación, con posición forzada y estiramiento más allá de los límites de los ligamentos de la articulación. Los síntomas de los esguinces son calor local que implica inflamación, alteración de la sensibilidad del músculo, hinchazón y a veces hematoma y dificultad funcional.

¿QUÉ HACER? Se debe vendar la zona durante las 48 primeras horas pero no inmovilizarla por completo. El hielo reduce el dolor y se debe aplicar lo antes posible